Es algo que os preocupa y preguntáis muchas veces.

No debemos alarmarnos, es algo que pasa frecuentemente en muchos niños.

El proceso habitual es cuando los dientes definitivos empujan a los de leche tras provocar la absorción de sus raíces y hacen que estos se caigan.

Pero hay veces que los dientes definitivos erupcionan de forma totalmente paralela a los de leche, un poco por detrás.

 Si están paralelos, unos detrás de otros, significará que no se están reabsorbiendo, como sería lo normal, y por tanto estos no se moverán en absoluto.

En esos casos, y si esto permanece así durante un tiempo, habrá que consultar con el odontopediatra, que hará una radiografía para confirmar la situación.

En casos así, es posible que haya que extraer los de leche, que tendrán su raíz prácticamente intacta.

Hay otros casos, en los que los dientes definitivos no tienen apenas sitio para salir.

Se ven los dientes de leche muy juntos, sin los típicos espacios entre diente y diente (diastemas) y con la arcada dental muy estrecha.

 Esto es típico en niños que se chupan el dedo o que respiran por la boca (o las dos cosas a la vez).

En estos casos ya se aprecia que hay una falta de espacio, que los dientes definitivos, empezando por los incisivos, no tienen por dónde erupcionar (Es el inicio del apiñamiento dental) Los dientes definitivos se colocarán de lado porque ocupan menos sitio.

Esto hace que sean más propensos a la caries y a la gingivitis porque es muy difícil limpiar correctamente los dientes, sobre todo en las caras interdentales(entre los dientes).

En estos casos ya estamos teniendo señales tempranas de que algo sucede en esa boca y será necesario actuar cuanto antes para favorecer el crecimiento correcto del hueso y que los dientes se coloquen en el sitio correcto.